1️⃣ Evita ayunar y picar entre horas. Si mantenemos el número de comidas que llevamos a cabo habitualmente, evitaremos darnos atracones en las comidas principales.
2️⃣ En las cenas o comidas navideñas cuida las raciones, los excesos pasan factura. Es importante también que los entrantes (tipo embutidos, patés, etc.) no impidan centrarte en el plato principal, que puede tratarse, por ejemplo, de pescado, marisco o alguna carne.
3️⃣ Varias opciones de entrantes ligeros más saludables serían ensaladas, untables vegetales, salmón ahumado, marisco hervido, una tabla de queso y/o de carnes magras como el jamón o el lomo…
4️⃣ Come despacio, tranquilamente y masticando bien los alimentos.
5️⃣ Limita el consumo de dulces navideños a los días festivos. Se puede disfrutar de ellos sin remordimientos, siendo conscientes de lo que estamos comiendo y degustándolos con moderación.
6️⃣ Reduce la ingesta de alcohol. Ya no solo por la cantidad de azúcar y, por tanto, por las kcal vacías que contiene, sino porque es inflamatorio y puede provocar problemas digestivos a corto plazo. Siempre será mejor hidratarse con agua y reservar el alcohol para brindar.
7️⃣ Para el resto de comidas de estos días en los que no haya celebraciones, recuerda que es importante comer frutas, verduras y hortalizas por su contenido en fibra y para equilibrar los excesos. Y siempre es mejor optar por técnicas de cocción saludables, como vapor, horno o plancha, evitando así las frituras y salsas industriales.
8️⃣¡Muévete! Aunque te dé pereza. Durante estos días es importante seguir o incluso ampliar nuestra rutina de ejercicio. La recomendación es realizar como mínimo 30 minutos al día.
