En los últimos años se ha estudiado cómo la mala calidad y cantidad del sueño puede ser un factor promotor de sobrepeso y obesidad.
Si realizamos una revisión bibliográfica, podemos observar que diversas publicaciones han determinado que los trastornos del sueño producen alteraciones de tipo metabólico y conductual que llevan a la sobreingesta de alimentos.
Este hecho podría explicarse a través de las hormonas que regulan el apetito: la ghrelina (aumenta el apetito) y la leptina (incrementa la sensación de saciedad). De este modo, se ha observado que cuando no se duerme correctamente, los niveles de ghrelina aumentan y los de leptina disminuyen, por lo que tendemos a comer más.
Por este motivo, una de las recomendaciones más sensatas a la hora de perder peso de manera saludable es asegurar un adecuado descanso durmiendo como mínimo unas 7 horas.
📖Bibliografía:
✔Smiley, A., Wolter, S., & Nissan, D. (2019). Mechanisms of Association of Sleep and Metabolic Syndrome. J Med – Clin Res & Rev, 3(3): 1-9.
✔Thompson, N., MSN, RN, CPNP, CBN. (2018). Sleep and Association With Obesity, Journal of Pediatric Surgical Nursing, 7(4), 109-111.
✔Escobar, C., González, E., Velasco, M., Salgado R. & Angeles M. (2013). La mala calidad de sueño es factor promotor de obesidad. Revista mexicana de trastornos alimentarios, 4(2), 133-142.
✔Chamorro, R., Durán, S., Reyes, S., Ponce, R., Algarín C. & Peirano P. (2011). La reducción del sueño como factor de riesgo para obesidad. Revista médica de Chile, 139(7), 932-940.